viernes, 26 de febrero de 2010

La Hora de los Valientes

Parece increíble pero existe una correlación entre la crisis económica y las condiciones meteorológicas. Parece que cuanto más se recrudecen las condiciones económicas más arrecia el temporal de frío, lluvia y viento. Es como si el cielo quisiera colaborar haciéndonos esta prueba mucho más dura. ¿Tendremos que esperar a ver los primeros rayos de sol para que la situación económica mejore? Claramente no, sólo veremos mejora económica si somos capaces de dar un paso al frente y afrontamos estos momentos con valentía y arrojo porque ES LA HORA DE LOS VALIENTES.

Es la hora de los políticos comprometidos, que saben ver más allá de intereses de partidos y decisiones electoralistas y toman medidas necesarias y urgentes, que no se dejan llevar por viejas estructuras de poder e intereses creados y son capaces de gastar el dinero público de manera eficiente y responsable. Es la hora de políticos que buscan consenso y no la confrontación. Es la hora de establecer las bases para una administración pública sostenible y unos servicios públicos razonables (piscina climatizada en cada pueblo? Hospedería en cada pueblo? Hospital en cada pueblo?...). Es la hora de políticos que sepan ver el futuro y no trabajen sólo a corto plazo.

Es la hora de empresarios atrevidos, de aquellos que mantienen sus proyectos de inversión en estos tiempos, de los que crean empleo o lo conservan, de los que son capaces de hipotecar su vida por salvar su empresa, de los que trabajan de sol a sol, de los que innovan, de los que colaboran, de los que luchan contra los cargos vitalicios y las viejas estructuras de poder, de los que creen que el mérito es lo único válido para mantenerse en los cargos, de los que siguen siendo capaces de ilusionar.

Es la hora de sindicatos responsables, que entiendan que la mejor política social es el trabajo, que entiendan que los subsidios nunca han desarrollado una sociedad, que sean capaces de hacer reflexión interna y de cambiar sus estructuras y dependencias, que vean que con un 20% de tasa de paro algo tiene que cambiar en nuestro mercado laboral y estén abiertos a nuevas propuestas, que no sostengan la mediocridad y apuesten por el trabajo bien hecho y la productividad.

Es la hora de las entidades financieras sensibles, que sepan entender la situación y apoyen a la empresas, que den liquidez al mercado y no la inviertan en productos sin riesgo, que no presuman de grandes beneficios que son a costa de todos nosotros, no es el momento de sacar pecho por eso y sí el de arrimar el hombro, que busquen soluciones para aquellos que necesitan un respiro pero que quieren cumplir con sus obligaciones, que estén en nuestro lado y no enfrente.

Es la hora de la sociedad civil callada durante muchos años, de levantar la voz y exigir a todos aquellos valientes con responsabilidad que den un paso al frente y no sean islas en el mar de mediocridad que nos rodea, es la hora de hacerse oír y de sacrificio colectivo, es la hora de dar y de pedir, es la hora de los generosos, de los honestos y los íntegros, es la hora de gastar y disfrutar si se puede y de ayudar a los que peor lo están pasando, es la hora de todos.
En definitiva es LA HORA DE LOS VALIENTES.

2 comentarios:

  1. me ha encantado. ES LA HORA DE LOS VALIENTES!

    ResponderEliminar
  2. Hace poco leía el libro La Buena Crisis de Alex Rovira y en uno de sus apartados había este párrafo el cual me hizo pensar durante tiempo:

    "Porque en el marasmo de euforia económica parecía no haber mucho espacio para la reflexión serena. Se debía cabalgar en la cresta de una ola que crecía empujada por la embriaguez global, la ambición desmesurada, la percepción subjetiva de riqueza que generaba la extraordinaria facilidad de endeudamiento, pero también por la angustia y la ansiedad que nacen de la presión competitiva para sacar tajada de un pastel saturado de levadura que parecía crecer y no tener fin. Pero algo no cuadraba cuando, en paralelo, y contemplando otro tipo de indicadores, esta vez relacionados con la salud de la especie, uno observaba estupefacto que las enfermedades psicológicas, la depresión, la angustia, o las urgencias psiquiátricas se disparaban a un ritmo incluso mayor que los indicadores de aquello que se viene a llamar "crecimiento económico"."

    Es la hora de que vuelvan los valores, es la hora en la que la ética, la honestidad, la autenticidad, el esfuerzo, la pasión, el coraje, la empatía....tienen que dar un paso al frente y hacerse con el control de la situación. Pero sobre todo es hora de que vuelva el optimismo y para ello es importante que esos valientes sean capaces de trasmitir su energía a todos los que les rodean, energías que servirán para contrarrestar las corrientes negativas.

    Dari, gran iniciativa. Ya tienes otro seguidor.

    ResponderEliminar